viernes, 16 de agosto de 2013





Al eneldo vara
y
 al comino palo

 

El SEÑOR es quien le enseña al hombre la ciencia.
Es una verdad indiscutible, que se acepta tarde o temprano; y es que nosotros solo descubrimos sus diseños y avances en todos los campos. Si bien esto es verdad, a nosotros nos queda solo aplicarnos al estudio para comprender uno u otro fenomeno del mundo que nos rodea y  para llevar esta u otra solución a las necesidades actuales. Y no solo a las necesidades sino porque no decirlo, al disfrute y entretenimiento de de nuestro breve paso por este mundo.
Nos sorprendemos cada minuto con una nueva aplicación o con una mejora a la última adquisición de nuestro interes.
Tal vez fallemos en nuestra aplicación o en nuestros excesos sin que esto sea responsabilidad de Dios; es solo nuestra, sin restarle grandeza a cada invento hecho para nosotros por el unico Dios que era es y será.
La Biblia dice:
¡Qué profundas son las riquezas de la sabiduría y el conocimiento de Dios!
¡Que indescifrables sus juicios e impenetrables sus caminos!
<<¿Quién ha conocido la mente del Señor, o quién ha sido su consejero?>>
<<¿Quién le ha dado primero a Dios, para que luego Dios le pague?>>
Porque todas las cosas proceden de él, y existen por él y para él.
¡ A él sea la gloria por siempre! Amén. (NVI) Romanos :11 : 33 - 36
Y es que se nos revela:
En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.
Él estaba con Dios en el principio.
Por medio de él todas las cosas fueron creadas; sin él, nada de lo creado llegó a existir. (NVI) Juan 1 : 1 - 3
¿No es maravilloso?
El Dios eterno nos deja saber quién hizo todo y nos enseña desde lo más  elemental hasta lo más complejo.
Por ejemplo lo siguiente es admirable:
Escuchen, oigan mi voz; preste atención, oigan mi palabra:
Cuando un agricultor ara para sembrar, ¿ lo hace  sin descanso? ¿ Se pasa todos los días rompiendo y rastrillando su terreno?
Después de que ha emparejado la superficie, ¿no siembra eneldo y esparse comino? ¿ No siembra trigo en hileras, cebada en el lugar debido, y centeno en las orillas?
Es Dios quien lo instruye y le enseña cómo hacerlo.
Porque no se trilla el eneldo con rastrillo, ni sobre el comino se pasa una rueda de carreta, sino que el eneldo se golpea con una vara, y el comino con un palo.
El grano se tritura, pero no demasiado, ni tampoco se trilla sin descanso.
Se le pasan las ruedas de la carreta, pero los caballos no lo trituran.
También esto viene del SEÑOR Todopoderoso, admirable por su consejo y magnífico por su sabiduría. (NVI) Isaias 28 : 23 - 29
Ahora en cuanto a lo que debemos saber tambien nos instruye:
>> Lo secreto le pertenece al SEÑOR nuestro Dios, pero lo revelado nos pertenece a nosotros y a nuestros hijos para siempre, para que obedezcamos todas las palabras de esta ley. ( NVI)
Deuteronomio 29 : 29
¿No es para estallar de alegría? ¿No es para agradecerle con cantos?
Sin embargo tambien nos advierte:
>>"Tú, Daniel, guarda estas cosas en secreto y sella el libro hasta la hora final, pues muchos andarán de un lado a otro en busca de cualquier conocimiento." (NVI)
Daniel 12 : 12: 4
¡Gracias SEÑOR Jesús!


 













Olas Gigantes - Tormenta en el mar

El Señor está en medio de ti, poderoso,  el salvará; Sofonias 3:17